En un grave episodio de violencia
institucional, la diputada nacional Vanina Biasi denunció haber sido víctima de
represión durante una protesta de jubilados en la que participaba. Biasi, quien
acompañaba a los manifestantes en defensa de sus derechos, sufrió el impacto
directo de gases lacrimógenos en su rostro y cuerpo, lo que calificó como una
política de tortura.
En dialogo con Carlos Ojeda para la Constructora 103.3, comentó: "La represión llevada adelante en el
día de ayer por Patricia Bullrich a una movilización de jubilados es la
demostración clara de que el proyecto económico y social propuesto por Javier
Milei está absolutamente fracasado. El único rumbo que puede ofrecer este país
es de miseria, hambre, despidos y rebajas jubilatorias", declaró Biasi.
La diputada señaló que la respuesta del
gobierno a las protestas populares ha sido la represión sistemática y el
amedrentamiento, en lugar de abordar y solucionar los problemas sociales.
"En el día de ayer, como ocurrió hace 15 días y antes también, Patricia
Bullrich buscaba la postal de la represión para desanimar a la gente a que no
se movilice", afirmó.
Biasi describió la brutalidad de la
represión, indicando que nunca antes había sentido una quemadura tan intensa
por gases lacrimógenos. "Ayer yo sufrí el impacto de los gases
directamente en mi cara y en mi cuerpo. Tengo muchos años de militancia y
muchas veces tuve que sufrir represiones, pero nunca los gases me habían
quemado tanto como en esta oportunidad", relató.
La diputada anunció que presentará acciones
legales contra la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y redoblará
esfuerzos para ampliar la movilización popular. "Vamos a insistir para que
se amplifique la movilización popular, porque va a ser la única manera en que
le vamos a frenar la mano a este gobierno de miserables ajustadores de jubilados
y represores", sostuvo Biasi.
Además, convocó a una nueva movilización en
la Plaza de Mayo en el Día de los Jubilados y expresó su compromiso de seguir
luchando en las calles y en el ámbito legal para detener lo que calificó como
una "política criminal". "No vamos a parar hasta hacer
retroceder esta política", concluyó Biasi.
Este incidente refleja la creciente tensión
social y política en Argentina, donde la represión a manifestaciones pacíficas
se ha convertido en un preocupante método de control social.