Norma Gómez,
vecina del barrio nos cuenta que esta situación es algo ya de años “esto ya
acontece más o menos hace nueve años, supuestamente”, nos relata que cuando
regreso a vivir nuevamente al barrio le sorprendió el notable olor a desechos
cloacales, ahí fue donde se enteró que estaban realizando una zanja para que
salga el agua ‘de los pozos’, “yo no sabía qué pozos, me acerqué, y cuando vine
saqué fotos para ver a quien solicito para que venga a ayudarnos”.
En la búsqueda de una solución.
Norma nos cuenta
que desde la vecinal no pudo obtener ayuda, se reunió con algunos vecinos
porque iba a venir el asesor de Ana Clara Romero y no llegaron, cabe destacar
que esto fue en el mes de noviembre.
“Que vengan las
personas que tienen que venir y hacerse cargo. Porque esto, cuando se empiece a
caer el edificio, aparte de las cucarachas que conviven con nosotros, esto va
ser imposible de curar, es un barrio abandonado”.
“El IPV se desentiende porque obviamente ellos
entregan las viviendas y después ya los dueños verán lo que hacen. pero acá no
hay nada, nadie coopera”.
El problema ambiental y de la basura es un reclamo
persistente de los vecinos.
Otro problema en
el barrio, es la poca disponibilidad de contenedores para arrojar la basura, la
cual, por la cantidad de gente, se acumula rápidamente.
“Dos contenedores
no dan abasto, y ni te podés acercar a los contenedores. Tiras la bolsa de
basura de acá a un kilómetro porque obviamente no te podés acercar”.
“Lo único que apuntamos es que vengan antes que el
edificio se caiga. Porque esto va a ser peor, va a ser algo bastante que va a
ocasionar muchísimos problemas”.
Gonzales, otro
vecino del barrio nos relata que el problema de cucarachas es algo de todos los
días ya.