“Estábamos en un
día normal de trabajo, siendo alrededor de la una menos diez, antes del cierre,
apareció gente de la Casa Central de Recursos Humanos con gente de Recursos
Humanos de la Corporativa, porque el banco donde trabajamos tiene una empresa
corporativa que tiene cuatro bancos, Banco Santa Cruz, San Juan, Entre Ríos y
Santa Fe. Vino gente de la corporativa con el escribano y sin avisarnos nada,
cerraron la puerta a una menos diez, nos reunieron en la gerencia y nos dijeron
que a partir de ese día la sucursal del Banco Santa Cruz cerraba la puerta y que,
a partir de ese momento, los tres empleados que eran de la sucursal estábamos
despedidos”.
Una situación tensa
Alfonso nos
cuenta que no fue una situación fácil “no esperábamos esto, mis dos compañeras
entraron en crisis obviamente porque es una situación muy complicada, no somos
jóvenes como para salir y conseguir trabajo controlado. Yo tenía 19 años
trabajando en el mismo banco”.
“No nos obligaron a firmar las cosas, pero como que
nos daba a entender que teníamos que sí o sí firmar para llegar a un mejor
acuerdo después”.
Según relata
Alfonso, en la Secretaría de Trabajo fueron representantes del banco,
representantes del sindicato y la gente de la secretaria de trabajo, pero no
les permitieron ingresar a ellos “el sindicato nos representa y no se llegó a ningún
acuerdo porque la gente del banco quiere archivar lo que hizo, según ellos,
dicen que actuaron bajo la ley”.
“Vamos a ver cómo lo manejamos, cómo seguimos en
adelante. Porque indudablemente el banco no está dispuesto a negociar la
reincorporación de ninguno de los tres, para ellos es una determinación ya
tomada y no están dispuestos a dar marcha atrás”.