El caso, que ha
tomado notoriedad pública tras la difusión de una cámara oculta que expone cómo
el profesional de la salud emitiría certificados médicos falsos a requerimiento
de empleados sin diagnóstico ni tratamiento verídico alguno, a cambio de sumas
de dinero. La maniobra fraudulenta afectó a un número significativo de empresas
y comercios locales, que durante meses e incluso años, se vieron obligadas a
afrontar costos económicos desmedidos, en la mayoría de los casos de entre 1600
y hasta 2.000 dólares mensuales por empleado que gozarían de la licencia
psiquiátrica expedida por Soria.
La denuncia penal
ya ha sido radicada formalmente y las asociaciones empresarias han solicitado
constituirse como querellantes en la causa, en un hecho sin precedentes en la
historia empresarial de la región. A través de esta acción, se busca no solo la
sanción de los responsables, sino también el establecimiento de controles más
rigurosos en la emisión de certificados médicos, garantizando la integridad del
sistema de licencias por enfermedad y la protección de la verdadera salud
mental de los trabajadores.
Antecedentes
El primer reclamo
formal de un socio en la Cámara de Comercio se suscitó en el año 2020, recién
iniciado el aislamiento por Covid 19. En
ese período la institución lanzó una encuesta consultando respecto de 5 años
hacia atrás, en la que participaron respondiendo 48 empresas: 18 de ellas
tenían uno o más casos de trabajadores con licencia por emisión de certificados
médicos y, al menos, el 50% de dichos certificados habían sido expedidos por el
profesional denunciado.
A principios del
año 2022, en conversaciones con la Asociación Hotelera y Gastronómica se
detectaron más casos con el mismo modus operandi. En función de ello se decidió
iniciar una acción en conjunto para obtener más información al respecto y
corroborar la veracidad de las licencias.
Se realizó una
nueva encuesta de similares características a la anterior, siendo que en esta
oportunidad participaron respondiendo 76 PyMEs hasta el momento: 47 de ellas
tenían uno o más casos de trabajadores con certificados médicos que les
otorgaban licencias y, al menos, 23 de ellos tenían certificados emitidos por
la misma persona. (Es decir, nuevamente el 50% de los trabajadores con
licencias psiquiátricas eran otorgadas por el profesional de la salud
denunciado), por lo que junto con otras evidencias recabadas se tomó la
decisión de promover una denuncia penal para que se investigue el accionar
descripto.
Motivos que
definieron el inicio de las acciones legales:
1. Evidente
riesgo para la salud pública
• La emisión indiscriminada de
licencias psiquiátricas sin diagnóstico ni tratamiento real podría poner en
riesgo a los trabajadores que sí pudieran padecer trastornos de salud mental y
requieren una atención profesional adecuada.
• Se ha manifestado que el médico no
realizaba evaluaciones clínicas reales, sino que simplemente otorgaba los
certificados en base a la solicitud de los empleados en consultas que no
duraban más de 10 minutos.
2. Impacto
económico en las empresas
• Cada licencia psiquiátrica falsa
genera un perjuicio económico de entre 1.600 y 2.000 dólares mensuales por
trabajador.
• Se han documentado casos de
empleados que estuvieron de licencia por más de un año sin justificación médica
real, afectando la operatividad y estabilidad financiera de las empresas.
• Estos hechos han generado un perjuicio
de ciento de miles de dólares anuales durante varios años al sector comercial y
al entramado productivo regional.
• Los altos costos generados son
absorbidos por los comerciantes, que resignan sus ganancias y/o trasladan a
costo, lo que encarece el precio final a los consumidores.
3. Falta grave y
mala praxis médica
• El accionar del que se acusa al Dr.
Marcelo Raúl Soria constituye un abuso de su título profesional y una violación
a la ética médica.
• Se ha solicitado tanto en sede
penal como administrativa la inhabilitación de su matrícula profesional y la
apertura de una investigación para determinar si existen otros profesionales
involucrados en la misma maniobra delictiva.
4. Fraude y
estafa laboral
• Los empleados que habrían adquirido
estos certificados, estarían abusando del sistema de licencias pagas, generando
perjuicios no solo para sus empleadores, sino también para otros trabajadores
que deben cubrir las ausencias.
• En muchos casos, las licencias
psiquiátricas habrían sido utilizadas como método de presión laboral,
solicitando cambios de condiciones o beneficios injustificados.
5. Reclamo de
justicia y cumplimiento de la ley
• Se exige el esclarecimiento
inmediato del caso y la aplicación de las sanciones penales correspondientes.
• La denuncia se ha realizado en base
al artículo 172 del Código Penal (estafa) y a los delitos de falsificación de
documentos (artículos 292 y 295 del Código Penal).
6. Licencias
extensas y condiciones no evidentes
• La particularidad que tienen las
licencias de salud mental es que los síntomas no se pueden determinar
fehacientemente mediante estudios clínicos, los períodos de licencia son largos
y los tratamientos pueden ser extensos, lo que genera un mayor costo económico
al empleador.
* Adicional a
ello, Soria indicaría a los trabajadores de qué manera responder ante un
control de la Medicina Laboral, para no evidenciar la falsedad de la licencia
emitida.
Desde las
entidades empresarias creemos firmemente que cualquier problema tanto de salud
como laboral debe resolverse a través de las vías y mecanismos establecidos
para esos fines, cumpliendo con los protocolos, atendiendo cada caso con la
importancia que lo demanda, buscando la mejor solución posible para todas las
partes y bajo ningún concepto recurrir a operaciones fraudulentas en ningún
caso, pero principalmente cuando se trata de la salud.